Mi cuaderno de la huerta, una guía para aprender jugando
My vegetable garden notebook, a guide to learning through play
María P. Campos-Soldini, Carlos E. Camaño Schettini y Sol Herbel
Fecha de recepción: 01/08/2025
Fecha de aceptación: 10/10/2025
Introducción
Las escuelas son un espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas
y para el progreso de la sociedad. En ella los niños y las niñas adquieren hábitos, se relacio-
nan con sus pares y hacen amigos (Desmond y Subramaniam 2004; Ozer 2006). Ir a la es-
cuela permite desarrollar su pensamiento, aprender a comunicarse, expresar sus emocio-
nes e ideas. Por ejemplo, al reconocer los objetos, organizarlos y nombrarlos, aprenden sus
propiedades; al explorar y reconocer el ambiente, son capaces de percibir como está la na-
turaleza. Entonces, ¿por qué son importantes las huertas en las escuelas?
No hay dudas que la acelerada inserción de la tecnología al mundo educativo ha traí-
do beneficios, que permitieron optimizar e innovar en el proceso de enseñanza/aprendi-
zaje. Desde esa perspectiva, la educación abre nuevos desafíos orientados a buscar herra-
mientas que confluyan con la inmediatez de la tecnología, donde la comunidad escolar y,
en especial, el maestro tendrá el desafío de instaurar conciencia ambiental para que los
Laboratorio de Entomología CICYTTPCONICETGob.ERUADER, 3105, Diamante, Entre Ríos, Argentina.
Cátedra de Sistemática Animal I, Facultad de Ciencia y Tecnología, UADER, 3105, Diamante, Entre Ríos, Ar-
gentina. Dirección de contacto: mariapaulacampos@gmail.com
Maestro Agropecuario Escuela N° 8 23 de Diciembre NINA. Pueblo Nuevo General Alvear, Departamento de
Diamante, Entre Ríos.
Profesora de Enseñanza Primaria. Secretaria General de AGMER (Asociación Gremial del Magisterio de En-
tre Ríos), Seccional Diamante.
Notas
Campos Solidini, M. P.; Camaño Schettini, C. E. y S. Herbel, Mi cuaderno de la huerta, una guía…
@rchivo 134
niños y niñas crezcan en ambientes escolares que otorguen la oportunidad de aprender y
familiarizarse con la tierra, la naturaleza y estilos de vida más saludables (Blair 2010; Feito
2011; Bustos-Zapata et al., 2017; Zambrano-Quintero et al., 2018).
Otras experiencias con huertas escolares han demostrado beneficios biopsicosocia-
les, relacionados con el fortalecimiento en los niños y las niñas del trabajo en equipo y de
participación, el desarrollo de la paciencia y del respeto por sus pares y de la naturaleza
(Moncada, 2017). También los huertos escolares son considerados un escenario de inclu-
sión social y familiar, donde además de desarrollar conocimiento, se fomenta la actividad
física (FAO, 2006; Abate et al., 2011; Alvarado-Ortiz, 2020). Muchas de las escuelas del De-
partamento Diamante se encuentran insertos en una zona rural, con maestros comprome-
tidos que innovan en sus prácticas de enseñanza la incorporación del huerto como un es-
pacio integrador y de aprendizaje.
En ese contexto, “Mi cuaderno de huerta” está orientado a adquirir conocimientos a
través de una guía didáctica para ser utilizada en el huerto y en el aula (Figura 1).
Figura 1. Portada “Mi cuaderno de huerta, una guía para aprender jugando”.
Autores: María P. Campos-Soldini, Carlos E. Camaño-Schettini y Sol Herbel
@rchivos Nº 7, diciembre 2025
DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA ISSN 2953-4852 (en línea)
@rchivos 135
Presentación
Este cuaderno que te presentamos (https://bit.ly/Micuadernohuerta) es el inicio de
una aventura escolar. Partiremos del suelo, de la tierra, sembraremos semillas llenas de
esperanza de las que cre-cerán plantas que nos servirán para educar a nuestros niños y
niñas en valores y conocimientos del medio natural que nos rodea. La Tierra premiará
nuestro esfuerzo con comida y grandes experiencias que seguramente vamos a disfrutar
mucho. Puede parecernos muy difícil, pero en realidad, tener un huerto en la escuela no
requiere de mucho espacio, ni de mucho tiempo, ni experiencia. Lo que si vamos a nece-
sitar son muchas ganas de trabajar, y contagiarnos de esas ganas de aprender. Además, te
brindaremos una serie de actividades para aquellos días que no se pueda trabajar al aire
libre. Con el Cuaderno de Huerta...
Acompañamos en la construcción de un espacio de aprendizaje que mejora la con-
vivencia entre niños a través del acto de compartir, cooperar, intercambiar opiniones
y ejercitar el trabajo grupal.
Orientamos en los aspectos técnicos-productivos para el desarrollo de un espacio
que permita el contacto con la naturaleza, instancia propicia para mantener la armo-
nía, descubrir la vida en relación con los ciclos ecológicos y el reconocimiento del
valor biológico y cultural de la biodiversidad.
Facilitamos la creación de un aula verde en cada escuela como espacio lúdico, recrea-
tivo, donde los saberes se incorporan en el hacer en conjunto, entretejiéndose con
la experiencia familiar, social, y cultural de todos los niños.
Brindamos un momento de intercambio entre docentes.
Acompañamos para lograr hacer de la huerta una Herramienta pedagógica, que me-
diante el aprender-haciendo, posibilite relacionar los conocimientos contenidos en
la currícula.
¿Para quién va dirigido este cuaderno?
Es para toda aquella persona interesada en iniciar o mejorar un huerto escolar. Por
ejemplo, para un profesor, o el administrador de un huerto, o un grupo de maestros, pa-
dres y miembros de la comunidad de una escuela o de diferentes escuelas. El rango etario
propuesto es de niños y niñas de las escuelas primarias del departamento Diamante.
Notas
Campos Solidini, M. P.; Camaño Schettini, C. E. y S. Herbel, Mi cuaderno de la huerta, una guía…
@rchivo 136
En los huertos escolares que funcionan adecuadamente, todo el personal de la es-
cuela está involucrado de alguna u otra manera y da una mano. Tanto los maestros como
otros miembros de la escuela pueden contribuir en:
Asesorar sobre la nutrición, higiene, preparación, y conservación de los alimentos.
Usar el huerto para sus materias, porque los huertos son observatorios especial-
mente valiosos para las ciencias, matemáticas, estudios ambientales, tecnológicos, y
un buen estímulo para producir descripciones escritas.
Finalmente, también va dirigido para la familia. Estos espacios resultan más satis-
factorios cuando la familia está inserta y comprometida, y es deseable que ésta participe
desde el comienzo en la planificación del huerto, ya que de este modo se forja un compro-
miso y se estimula el interés en las actividades de la escuela.
Conceptos que acompañarán este cuaderno escolar
Huerto escolar: espacio físico educacional con acceso a luz solar y agua, destinada
para la siembra de plantas de huerta, aromáticas y medicinales, y plantas con flores.
Tendrá el objetivo de que la comunidad educativa experimente diferentes activida-
des orientadas al aprendizaje como al desarrollo de actitudes y valores relacionados
con el bienestar de los niños y niñas, y familiar.
Elementos para trabajar la huerta (Figura 2).
Suelo: superficie de la corteza terrestre, constituido por materia orgánica, e inorgá-
nica, compartimentos de aire, micro y macro- organismos, y agua.
Siembra: proceso en el que se dispersan semillas.
Planta: vegetal que se caracteriza por crecer arraigado al suelo y que se alimenta de
los nutrientes de la tierra. Puede servir para consumo humano, aromatizante o como
plantas trampa.
Semillas: estructura embrionaria que se transformará en planta de cultivo.
Compost: abono natural obtenido de la degradación de la materia orgánica (restos
de orgánicos, no cocidos) (Figura 3).
@rchivos Nº 7, diciembre 2025
DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA ISSN 2953-4852 (en línea)
@rchivos 137
Plagas: organismos que al estar sobre una planta en grandes poblaciones causan
daño (Figura 4).
Figura 2. Fragmento del libro “Herramientas para Figura 3. Guía para el mantenimiento de la Compostera
trabajar la huerta” en la escuela (fragmento del cuaderno)
Figura 4. Fragmento del libro “¿Los malos de la huerta?”
Notas
Campos Solidini, M. P.; Camaño Schettini, C. E. y S. Herbel, Mi cuaderno de la huerta, una guía…
@rchivo 138
Consideraciones finales
Los huertos escolares son espacios de encuentro educativo que pueden contribuir
en una formación integral. De acuerdo con Haros et al. (2013), en ellos se aprende a cuidar
la naturaleza, a tener una mejor alimentación y a mejorar las relaciones entre las personas.
Esto se encuentra sustentado en diferentes trabajos donde se habla del potencial que estos
espacios tienen en los resultados académicos, principalmente en las Ciencias Naturales.
Además, las huertas escolares pueden favorecer la integración grupal y el trabajo colabora-
tivo (Blair, 2010; Williams y Dixon, 2013; Moncada, 2017; Santiz, 2018). El huerto escolar es
un espacio de encuentro y colaboración entre estudiantes-docentes, por el simple hecho
de que interactúan en las diferentes actividades para el establecimiento y mantenimiento
del huerto, como la observación, mediciones, trasplantes, siembra, entre otras muchas.
Este tipo de actividades fomenta en el estudiante un sentimiento de identidad y pertenen-
cia hacia la escuela y, por lo tanto, mejorar la relación estudiantes-familias-escuela. Con
este aporte pretendemos promover los huertos escolares en el Departamento Diamante ya
que los mismos necesitan seguir siendo impulsados por las escuelas y la sociedad en su
conjunto. Además, porque responden a problemáticas alimenticias, ambientales y econó-
micas relevantes en la actualidad… en un contexto como el de hoy en día, donde además
existen huertos urbanos, comunitarios, familiares.
Bibliografía citada
Blair, D., 2010. “The child in the garden: An evaluative review of the benefits of school
gardening” (pp. 15-38). The Journal of Environmental Education 40(2).
Bustos-Zapata, N.; Corvalán-Aguilar C. y M. L. Garmendia-Miguel, 2017. Un espacio
de encuentro con la naturaleza y la enseñanza “Escuala Huerto”. Universidad Nacio-
nal de Chile, Instituto de Nutrición de los Alimentos Doctor Fernando Monckeberg
Barros 107 pp.
Desmond, D. y A. Subramaniam, 2004. Revisiting garden-based learning in basic edu-
cation. FAO, Roma.
FAO, 2006. Crear y manejar un huerto escolar. Un manual para profesores, padres y
comunidades. Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimen-
@rchivos Nº 7, diciembre 2025
DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA ISSN 2953-4852 (en línea)
@rchivos 139
tación, Roma, 198 pp.
Feito, R., 2011. Los retos de la participación escolar. Elección, control y gestión de los
centros educativos. Morata, Madrid.
Moncada, S., 2017. La huerta escolar agroecológica como ambiente de aprendizaje co-
laborativo en el Colegio Monseñor Ramón Arcila del Carmen de Viboral [Tesis pre-
grado]. Universidad de Antioquia-Seccional Oriente, El Carmen de Viboral.
Ozer, J., 2006. “The effects of school gardens on students and schools: Conceptual-
ization and considerations for maximizing healthy development” (pp. 846-863).
Health Education & Behavior, 34(6): http://dx.doi.org/10.1177/1090198106289002
Santiz, G., 2018. El huerto escolar, oportunidad para fortalecer el trabajo colaborativo
y la integración entre los estudiantes de escuelas primarias (Tesis de maestría). El
Colegio de la Frontera Sur, San Cristóbal de Las Casas, México.
Cita: Campos-Soldini, M. P.; Camaño Schettin, C. E. y S. Herber, 2025. “Mi cuaderno de la huerta, una guía
para aprender jugando” (pp. 133-139), @rchivos de Ciencia y Tecnología Nº 7, FCyT-UADER, Oro Verde.