El 11 de septiembre no habrá actividades en la FCyT ni en la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER), por el Día del Maestro, instituido en homenaje a Domingo Faustino Sarmiento y como un reconocimiento, en su figura, a una labor cotidiana de maestras y maestros que trasciende los límites explícitos de los contenidos.

Sarmiento fue una figura fundamental en la historia de la educación formal en el país. Es considerado por muchos como el padre del aula; es, sin ninguna duda, el creador de la escuela pública, el artífice del normalismo y de las ideas que se plasmaron en la Ley 1420 que estableció la educación universal, obligatoria, gratuita y laica.

La celebración en su honor surgió en la Primera Conferencia de Ministros y Directores de Educación de las Repúblicas Americanas, que se desarrolló en 1943 en Panamá, pero se concretó recién en 1945, a través de un decreto firmado por el entonces presidente de facto Edelmiro Farrell, por “su abnegación y sacrificio guía los primeros pasos de nuestras generaciones y orienta el porvenir espiritual y cultural de nuestros pueblos”.

La propuesta consistía en reconocer en Sarmiento la labor cotidiana de maestras y maestros que trasciende los límites explícitos de los contenidos. En el mismo texto de la resolución se destaca el trabajo como “una actividad fundamental de la escuela, la educación de los sentimientos, por cuyo motivo no debe olvidarse que entre ellos figura en primer plano la gratitud y la devoción debidas al maestro de la escuela primaria”.

Seis días después, el 17 de septiembre, se instituyó en el país el Día del Profesor y la Profesora, en honor a José Manuel Estrada, educador e intelectual, contemporáneo de Sarmiento y divulgador de su legado.

La presencia de ambos, de Sarmiento y Estrada, es reconocible en historiografía entrerriana: ambos perpetuaron su nombre y su memoria en escuelas, salones, bibliotecas. Sarmiento, además, impulsó la creación de la Escuela Normal de Paraná, la primera institución normalista de nivel nacional fundada en el país y que visitó en alguna ocasión para entregar, personalmente, el diploma a los maestros egresados.

Aquella inspiración del irascible sanjuanino lleva hoy el nombre de Escuela Superior José María Torres, su edificio ha sido declarado Monumento Histórico Nacional por el Congreso y se encuentra actualmente dentro de la órbita de UADER, ya que depende de la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales, que la posiciona como una escuela preuniversitaria integrada por sus tres niveles: Educación Inicial, Educación Primaria y Educación Secundaria.

En ellos, en Sarmiento y Estrada, la FCyT saluda a todas las maestras y maestros, a las profesoras y profesores, quienes a pesar de los contextos y las circunstancias continúan con su importante labor de enseñar.