8 DE MARZO: DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

Con motivo de conmemorarse un nuevo Día Internacional de la Mujer, este 8 de marzo, desde el Área de Cultura de la Secretaría de Extensión, se propone una reflexión sobre el avance en la consagración de la igualdad de género

 

 

Las mujeres y el marco jurídico
La reforma jurídica en pro de los derechos de las mujeres ha avanzado de manera considerable en los últimos 30 años. A nivel mundial, 139 constituciones consagran la igualdad de género, 125 países proscriben la violencia doméstica, al menos 117 tienen leyes de igualdad de remuneración, 173 garantizan la licencia de maternidad con goce de sueldo y 117 prohíben el acoso sexual en el lugar de trabajo. Las mujeres gozan de igualdad de derechos de poseer una propiedad en 115 países y en 93 tiene derechos de herencia igualitarios.
La fortaleza de una constitución radica en que, a diferencia de las leyes que se pueden aprobar y derogar conforme a la voluntad de las tendencias políticas que ocupan el poder en un momento dado, las constituciones suelen ser imposibles de modificar, reformar o derogar más de una vez en cada generación. Una vez las garantías y los derechos de igualdad de género han quedado ratificados de esta manera, son menos susceptibles de ser anulados luego de un giro político o cambios en la administración del gobierno.
A pesar de este progreso, el marco jurídico sigue estando intrínsecamente sesgado contra las mujeres en numerosos contextos. En algunos casos, las leyes simplemente las discriminan, negándoles sus derechos o reduciéndoselos con respecto a aquellos de los hombres. En muchos otros, las leyes se basan en normas de justicia masculinas que suponen que mujeres y hombres enfrentan la ley en términos de igualdad, lo cual rara vez es así. Debido a ello, incluso leyes que en principio parecen neutras en términos de género pueden tener efectos sesgados.
Hay dos áreas en las que los derechos de las mujeres están mas desprotegidos, donde el estado de derecho es más imperfecto y los privilegios de los hombres se defienden con más tenacidad: por una parte, los derechos de las mujeres en su esfera privada y doméstica, como su derecho a vivir sin violencia y a tomar decisiones con respecto a su sexualidad, el matrimonio, el divorcio y la salud reproductiva; y, por otra , los derechos económicos, incluyendo el derecho al trabajo digno y el derecho a heredar y controlar tierras y otros recursos productivos.

Fuente texto y foto: 2011-2012 El progreso de las Mujeres en el mundo: En busca de la Justicia, ONU MUJERES Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Emponderamiento de las Mujeres, New York, Estados Unidos