2 DE JULIO: DÍA DE LA AVICULTURA. SUS APORTES Y ALCANCES

Con motivo de esta conmemoración, repasamos el trabajo de formación que se lleva adelante en cuatro localidades de la provincia a través del dictado de la Tecnicatura en Granja y Producción Avíola y su inserción laboral. También compartimos una entrevista al Dr. Dante Bueno sobre una investigación vinculada a la actividad. 
 

La FCyT contempla dentro de su oferta académica a la Tecnicatura en Granja y Producción Avícola. La carrera tiene una duración de tres años y se dicta actualmente en las ciudades de Crespo, Gualeguay; Santa Elena y Basavilbaso y es una propuesta que se vincula estrechamente con el desarrollo productivo de estas regiones y sus zonas aledañas, uno de los ejes que la Facultad considera fundamental para su inserción real en el territorio. 

Para dar cuenta de los aportes académicos y sociales de la carrera, funciones y modalidades de cursado, en esta nota se reúnen testimonios de Javier Berbauvede, coordinador de la Sede Basavilbaso; Marina Ahibe, coordinadora administrativa de Extensión Áulica en Gualeguay; Glenda Kihn, responsable de Comunicación de la Sede Crespo; Ariel Juárez, coordinador de la Sede Santa Elena; y del investigador Dante Bueno.  

BASAVILBASO

En 1994, con la creación del Instituto Superior Técnico de Basavilbaso, se dan los primeros pasos de esta formación en la ciudad. En 2003, se aprueba la carrera universitaria, ya bajo la órbita de UADER. Cuenta con una matrícula de 30 ingresantes promedio, llegando a una cantidad de 60 estudiantes activos/as en los tres cursos.

“La Tecnicatura es una carrera técnico-profesional, con muy buena salida laboral, apoyada por las empresas del sector, como, Granja Tres Arroyos, Las Camelias, Soychú, DomVil, Bonnin, Fadel, Fepasa, Noelma, ierras del Río, Sede América, Indacor, La Morocha, AviGuri. Esto nos permite realizar clases prácticas en todos los eslabones de la cadena y que los/as futuros/as egresados/as se desempeñen profesionalmente en las mismas”, manifiesta Javier Berbauvede.

“Recibimos inscripciones de muchas localidades, más de la costa del río Uruguay, y también de otras provincias. En los últimos años la demanda nos ha superado gratamente y eso nos incentiva a mejorar cada día, adecuando los programas académicos para estar a la altura de los que las empresas requieren y los avances tecnológicos. Gran parte de éste reconocimiento hacia nuestros/as egresados/as se debe al plantel docente conformado por profesionales involucrados y comprometidos. Debido a la gran demanda de técnicos, se puede decir con orgullo que más del 90% de los egresados y también alumnos sin recibirse están desempeñándose profesionalmente en las muchas empresas avícolas existentes. Iniciamos el año 27 de nuestra existencia con muchos proyectos, muchas ideas, muchos sueños, tal vez no todos se cumplan, pero trabajando en equipo entre personal, docentes, alumnos/as, empresas, no cabe duda que muchos serán alcanzados”, relata.

CRESPO

En esta ciudad, la Tecnicatura nace como una iniciativa conjunta entre Gobierno-Empresa-Universidad en 2005 con una matrícula de 113 estudiantes locales y de distintas zona cercanas, siendo mujeres la proporción  mayoritaria. La matrícula actual es de 45 alumnos y alumnas. La inserción laboral de los/as técnicos/as es inmediata en su mayoría, siendo absorbidos/as por grandes y medianas empresas de la región y también por las empresas familiares en localidades con un perfil agroproductivo. 

“Por los conocimientos adquiridos, quienes egresan tienen la capacidad de relacionarse profesionalmente tanto con los mandos jerárquicos y/o profesionales veterinarios o ingenieros, como también, estar al mando de un grupo de operarios. La interacción con productores y empresas comienza a partir de las prácticas profesionales y las visitas educativas que se realizan en el marco de las asignaturas”, cuenta Glenda Kihn.

“La avicultura ha sido el vector económico de despegue de Crespo y sus alrededores, centralmente por la incorporación paulatina y complementación de todos los eslabones de la cadena productiva: producción primaria, industria y servicios. El desarrollo crespense y de la zona tiene que ver directamente con la industria avícola y su clúster, la cual dinamiza económicamente a través de la producción de huevos de gallina y pollos parrilleros, la faena en frigoríficos y todo el universo de servicios que esta actividad productiva conlleva. De esta forma, todo el trabajo se transforma en alimentos para cubrir la alimentación humana en el mercado interno e internacional como el huevo líquido y en polvo, la comercialización de carne aviar y sus subproductos. En este sentido, se presenta fundamental contar con esta mano de obra calificada que contribuye a su crecimiento y competitividad”, detalla.

GUALEGUAY

En 2009 comienza el dictado de la carrera en esta localidad. Ininterrumpidamente, año tras año se fueron aprobando y abriendo nuevas cohortes; las cuáles se han desarrollado  integralmente, con una matrícula de alrededor de 45 estudiantes. El cursado se lleva adelante en instalaciones del Complejo Educativo “Héctor y Sara Salas de Berisso”. 

“El crecimiento de la avicultura la ha convertido en la segunda producción pecuaria en nuestro país, intensificada por la utilización de tecnología y conocimientos zootecnicos. Eso nos convoca para formar personal profesional que se adecúe a los niveles tecnológicos con los que hoy se trabaja en las industrias avícolas. La carrera se implementa con el propósito de constituir un ámbito institucional de formación teórica y práctica, investigación, profundización y actualización de conocimientos, vinculados a la incumbencia profesional sobre Granja y Producción Avícola como así también disciplinas afines, lo que se refleja en los procesos evolutivos y planes de desarrollo Institucional”, comenta Marina Ahibe .

“El dictado de esta carrera surgió de la demanda de la comunidad, de la Empresa SOYCHÚ SAICFIA y de la Municipalidad, sumándose luego la Empresa DOMVIL SA. Hemos celebrado y renovado convenios anualmente. Llevamos materializados siete acuerdos, entre los cuales se encuentran una Granja Experimental a desarrollarse  en el Hogar Asilo de Menores San José, Capacitaciones en el Escuela Agro técnica y en diferentes sectores barriales”, especifica.  

“Es muy importante el desarrollo de la carrera para la comunidad y la región. Ciertos fenómenos contemporáneos definen escenarios de actuación profesional de alta especificidad, con requerimientos crecientes de conocimientos y solvencia de problemáticas de gran complejidad, esto  fundamenta el abordaje desde la formación universitaria, remarcando la valuación científica de los recursos humanos que forma este nivel académico”, indica. 

SANTA ELENA

Desde el año 2006 se dicta la Tecnicatura en Granja y Producción Agrícola en la ciudad de Santa Elena. Con un promedio de 35 ingresantes anuales, el cursado tiene su sede en Héctor Maya 82 – Villa Universitaria B° Sur. 

“Generalmente, la inserción laboral de las y los estudiantes es a partir del tercer año de la carrera, momento en que se desarrollan las prácticas de pasantías. La importancia de esta formación es esencial, debido a que la producción nacional de pollos está en más de un 50% en Entre Ríos y se requiere de recursos humanos especializados que permitan potenciar el sector productivo avícola”, precisa Ariel Juárez. 

ENTREVISTA AL INVESTIGADOR DANTE BUENO

¿Cuál es su tema de investigación?
Mi enfoque en investigación está puesto, principalmente, en las técnicas de detección de Salmonella spp. en distintas poblaciones avícolas y ambientes de las mismas y a la resistencia de estas bacterias a los antimicrobianos utilizados en salud humana y sanidad de las aves. Como parte de este trabajo abordamos, en especial, a las aves de producción intensiva, dada la importancia de las mismas en la provincia de Entre Ríos, junto a otros tipos de aves, como aves de traspatio, aves silvestres y aves de jaula. Este tema es parte del Proyecto de investigación y desarrollo acreditable de la UADER denominado “Detección de Salmonella spp. en aves y ambientes avícolas y resistencia a los antibióticos utilizados en salud humana y sanidad de las aves”, que empezó a financiarse desde el primer semestre del año pasado.

¿Qué tipo de conocimientos se generan desde la carrera?
En la Tecnicatura Universitaria en Granja y Producción Avícola se intenta generar conocimientos relacionados a avicultura para un/a técnico/a con mirada amplia a fin de que pueda hacer un aporte a la mejora de la producción avícola, tanto a nivel provincial como a nivel nacional. Esto se fundamenta en el programa de la carrera con distintas materias, salidas a campo, y prácticos en laboratorio y en los mismos establecimientos avícolas, Además, es de destacar que docentes de la carrera trabajan en empresas u organismos de ciencia y técnica relacionados al sector avícola local. Lo nombrado anteriormente facilita, de sobremanera, la inserción posterior de loss/as en una región avícola como es la que tiene la provincia de Entre Ríos.

¿Por qué considera importante investigar en la Universidad y cuál es la incidencia de la investigación que dirige en la comunidad? ¿Qué impacto tiene la producción de ese conocimiento en la región?
A mi entender, el investigar complementa la tarea docente y, considero que, es importante a fin de poder crear conocimiento. De esta manera, uno no sería sólo un lector y transmisor del conocimiento a estudiantes y a la sociedad de los que los otros hacen o lo que dicen los libros, sino también un participante más activo del mismo. Desde el proyecto que dirijo tratamos de aportar al mejor diagnóstico de Salmonella, considerada una las bacterias más importantes en avicultura por su impacto negativo tanto en la salud de las aves como en la inocuidad alimentaria. Además, el conocer los perfiles de resistencia de esta bacteria a los antimicrobianos nos lleva a utilizar mejor los antibióticos como terapéuticos, a fin de hacer un uso más responsable de los mismos, en un campo donde la resistencia a los antibióticos por parte de las bacterias está tomando cada vez más importancia. Por ello, la investigación que llevo adelante permite acercarse a los establecimientos avícolas a fin de tratar de solucionar un problema sanitario, que impacta directamente en el bolsillo del productor. En general, somos bien recibidos, además de no tener intereses comerciales con la investigación. Junto a ello, acercamos a los alumnos tanto a las granjas donde muestreamos como a la parte de laboratorio, donde se realiza todo el trabajo de detección bacteriana y posteriores estudios, que entiendo fortalecen la formación del alumno en su futuro laboral. Todo esto llevará a tomar medidas más adecuadas para el control de Salmonella spp. en los diferentes eslabones de la cadena productiva avícola y promover un uso racional de los antibióticos, en concordancia con las políticas que se llevan a cabo en la temática.

¿Qué articulaciones institucionales posibilitan el desarrollo de la investigación?
Las investigaciones que desarrollo se apoyan en trabajos conjuntos con profesionales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), de la Dirección de Recursos Naturales perteneciente al Ministerio de Producción, Turismo y Desarrollo Económico de Entre Ríos, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), de la Universidad Nacional de Luján, y de distintas sedes de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UADER (Crespo y Basavilbaso). A esto se suma la tarea de dos ayudantes de laboratorio, cubiertos con fondos provenientes de Fundación ArgenINTA. Todas estas interacciones permiten llegar mejor a terreno para que las investigaciones tengan más chances de ser exitosas.