El deporte puede desempeñar un papel de apoyo en la prevención de la violencia. Por ese motivo es que la Facultad de Ciencia y Tecnología y la Municipalidad de Oro Verde, en el marco de las acciones del nodo Comunidad,  han puesto en marcha una serie de actividades tendientes a generar espacios de reflexión y formación desde una perspectiva más equitativa en el ámbito deportivo.

Hace unos días se realizó el conversatorio el “Ley Micaela y Deportes: construyendo prácticas más equitativas”, del que participaron integrantes del equipo de gestión de UADER, trabajadores y representantes del Centro de Estudiantes de la FCyT, profesionales del Área de Desarrollo Social del municipio y la viceintendenta de Oro Verde, Mercedes Schvindt.

En el encuentro se planteó que el deporte puede ayudar a mitigar los conflictos al proporcionar un espacio neutral y pacífico de interacción y se trabajó en la necesidad de trazar estrategias de capacitación para los equipos de la Secretaría de Bienestar Estudiantil y el Centro de Estudiantes de la FCyT para promover prácticas equitativas, en las cuales el deporte puede convertirse en una herramienta para superar situaciones traumáticas y recuperar la confianza de las personas que han sido violentadas.

La Lic. Manianela Brafa y la Lic. Paula Truffe, profesionales del programa de prevención, protección y asistencia integral a personas en situación de violencia de género de la Municipalidad de Oro Verde, expusieron sobre la importancia de dar respuestas institucionales a través de la capacitación.

Uno de los aspectos más significativos de la jornada fue que, a partir de las intervenciones y el intercambio entre los diversos actores presentes, se logró avanzar en el acuerdo de líneas de acción concretas para seguir trabajando en la temática. 

En ese marco, la coordinadora de Género del Rectorado de UADER, Lic. Mariela Tisera; el secretario de Bienestar Estudiantil de la FCyT, Tco. Nicolás Guerra; y la coordinadora de Género de la FCyT, Esp. Jimena Santa Cruz, se comprometieron a generar futuras actividades de sensibilización, como la implementación de espacios de formación permanente para estudiantes, docentes y personal de gestión vinculados a la vida universitaria.